Argentina dijo ayer que buscará revertir, incluso con ‘acciones legales‘, los altos aranceles para sus exportaciones de biodiésel que estableció esta semana Estados Unidos, el principal mercado para el combustible.
En un comunicado, Argentina respondió a la decisión de Estados Unidos, conocida el martes, de aplicar aranceles preliminares de entre 50,29 por ciento y 64,17 por ciento para sus importaciones de biocombustible, por considerar que recibe subsidios que generan una competencia desleal.
La decisión tendrá un fuerte impacto sobre Argentina -uno de los mayores proveedores mundiales del biocombustible-, ya que el 90 por ciento de los 1,6 millones de toneladas de biodiésel que exportó el año pasado tuvo como destino Estados Unidos, lo que significó un ingreso de 1.200 millones de dólares para el sector.
‘Argentina buscará revertir esta decisión preliminar defendiendo el interés de nuestro país, evaluará todas las opciones disponibles y se reserva el derecho de llevar adelante las acciones legales pertinentes‘, señaló la Cancillería en el comunicado.
La advertencia del gobierno de recurrir a las vías legales constituye a su vez un anuncio de llevar el conflicto ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), si no se logra revertir las sanciones provisorias al concluir la investigación que lleva adelante el gobierno norteamericano.
El Gobierno argentino añadió que la tasa fijada por EEUU ‘no se corresponde con ningún tipo de investigación objetiva ni metodología aceptable desde el punto de vista de las normas de la OMC‘.
En una disputa similar con la Unión Europea, la OMC falló a favor de Argentina. El mercado europeo sigue cerrado para el país, pero la industria argentina de biodiésel espera una pronta reapertura.