Nota de TN
El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, reconoció este martes haber “discutido muy fuerte” con el presidente del bloque del Frente de Todos en la Cámara de Diputados, Máximo Kirchner, pero negó haberlo agarrado del cuello como circuló en algunas versiones periodísticas. “Sería deshonesto decir que no he discutido muy fuerte con él, ahora de ahí a agarrarlo del cuello no es lo que sucedió y no es la información correcta”, dijo el funcionario provincial.
El ministro de Seguridad cargó contra el expresidente, quien lo había criticado por su mensaje intimidatorio al dibujante Nik. En un comunicado, la oposición le pidió al funcionario un pedido de disculpas público.
Berni es un fiel discípulo de Cristina Fernández de Kirchner, pero sus diferencias con La Cámpora lo dejaron al borde del alejamiento de su cargo en la Provincia.
“Discutimos, sí, claro, por supuesto. En el Peronismo se discute y se discute fuerte, más cuando hay confianza de por medio. Sería deshonesto decir que no he discutido muy fuerte con él, ahora de ahí a agarrarlo del cuello y todo eso, obviamente que no es lo que sucedió y no es la información correcta”, aseguró el ministro bonaerense en diálogo con A24.
La fuerte pelea entre el hijo de la vicepresidenta y Berni fue consignada por el diario Clarín. Pero según el ministro, “está mal la información” respecto de los motivos por los que la discusión habría surgido. Negó que se trate del resultados de las PASO porque cuando sucedió la discusión el Frente de Todos estaba “ganando por 7 puntos”. Por el contrario, indicó que el enfrentamiento se debió a que ambos tienen “una visión táctica totalmente”.
“Si bien estratégicamente tenemos el mismo pensamiento de modelo de país, tácticamente cómo llegar a esos resultados y por sobre todas las cosas electoralmente tenemos diferencias ¿cuál es el problema?”, cuestionó Berni.
En ese sentido, habló sobre sus diferencias con La Cámpora. “No es una cuestión de caerme bien o no, yo creo en la representación. Yo estaba absolutamente convencido de que teníamos que hacer una interna, era la mejor manera de ordenar”, agregó.
El gobernador bonaerense Axel Kicillof y Máximo Kirchner se conocen desde hace años y hace tiempo que pertenecen al mismo espacio político. Aunque están peleados a partir de la designación de Martín Insaurralde como jefe de Gabinete bonaerense, poco después de la fuerte derrota del Gobierno en las elecciones primarias (PASO).
El exministro de Economía está golpeado después de ser desautorizado por Cristina Kirchner a partir de que viajara a El Calafate para reunirse con ella. En el encuentro en la ciudad santacruceña al que la titular del Senado llama su “lugar en el mundo”, la vicepresidenta le dio los nombres de los dirigentes que integrarían el gabinete bonaerense. Entre ellos el del intendente de Lomas de Zamora en uso de licencia con el que Kicillof está enfrentado, adelantó Marcelo Bonelli en TN.com.ar.
Fue en un almuerzo en la Casa Rosada. También debatieron sobre la suba de la inflación, la ley antidespidos y la doble indemnización. Participaron De Narváez, Eurnekian, Marcos y Alejandro Bulgheroni, Juan de la Serna, Javier Madanes, Marcelo Midlin, Jorge Brito hijo y Alejandro Simón.
Su llegada implicaba el alejamiento de Carlos Bianco, uno de los hombres de máxima confianza del gobernador. Los jefes comunales ganaron espacio en el armado político de la provincia de Buenos Aires y Kicillof se sintió desplazado.