Un juez concedió la autorización solicitada por la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), afectada por varias causas judiciales, para realizar en mayo un viaje a Grecia, Bélgica y Reino Unido de Gran Bretaña para impartir conferencias y reunirse con líderes políticos de la izquierda.
Según informaron ayer fuentes jurídicas, el juez federal Claudio Bonadio, con el visto bueno de la Fiscalía, autorizó a la ex jefa de Estado y a su hija, Florencia Kirchner, a que salgan del país del 5 al 19 del próximo mes a cambio de una fianza de 150.000 pesos (unos 9.700 dólares) cada una.
Además resolvió que ambas procesadas como supuestas jefas de una asociación ilícita en la llamada causa ‘Los Sauces‘ deberán presentarse en su juzgado en un plazo máximo de 48 horas tras su regreso al país, según la resolución firmada ayer. Con este permiso, y tras cumplir varios trámites ordenados, podrán salir del país debido a que la expresidenta ya fue autorizada por el juez federal Julián Ercolini, quien la procesó en la causa por direccionamiento de obra pública a favor del detenido Lázaro Báez y por el Tribunal Oral Federal 1 que debe juzgarla en la causa ‘dólar futuro‘.
Para poder viajar a Europa, la viuda del también expresidente Néstor Kirchner pidió permiso a la Justicia después de que a principios de mes Bonadio les prohibiera a ambas, así como a Máximo, el otro hijo de Fernández, salir del país tras dictar su procesamiento como presuntos líderes de una asociación ilícita destinada a cometer delitos de lavado de dinero junto a empresarios de la obra pública.
‘He de tener en cuenta que la nombrada siempre ha estado a derecho en las actuaciones (judiciales), que en la ocasión que se requirió su presencia acudió al llamado. A su vez ha acreditado las fechas de egreso e ingreso al país y lugar de residencia durante las fechas de solicitud‘, explica el juez en su resolución. En Grecia, Cristina mantendrá reuniones con el primer ministro griego, Alexis Tsipras.
Asimismo, en Bélgica tiene previsto participar de encuentros con parlamentarios de izquierda y progresistas, así como brindar un discurso sobre derechos sociales y humanos en Argentina y la región. En Londres fue invitada para brindar una conferencia en la Universidad de Oxford.