Maximiliano Conca, quien sufrió un infarto hace una semana en Chile, dejó ayer el hospital Centro de Salud de Tucumán, donde estaba internado luego de su traslado a la provincia, porque se sintió "abrumado por los medios".
Conca se ofreció, además, a realizar "trabajos ad honorem para cubrir los gastos" que debió afrontar el gobierno tucumano. Horas después de llegar desde Chile en un avión sanitario contratado por el gobierno provincial, Conca decidió irse por su cuenta, sin tener el alta médica, según confirmó el Ministerio de Salud de la provincia.
Las autoridades del ministerio explicaron que no pueden obligarlo a que permanezca internado debido a que "es una persona mayor de edad y está lúcido". El paciente se encuentra actualmente en el Centro Privado de Cardiología y ayer hizo pública una carta en la que agradeció al gobernador Juan Manzur y a los funcionarios del área de Salud que organizaron su traslado desde Chile en un avión sanitario privado.
"Soy un ciudadano de perfil bajo que jamás tuve conocimiento de la magnitud de esta situación hasta cuando llegué a mi amada provincia", explicó Conca. También destacó que de parte del personal del hospital Centro de Salud "tuve un trato magnífico", pero admitió que "me sentí abrumado por los medios".
En la carta, Conca les pidió a las autoridades del Poder Ejecutivo que "me permitan realizar trabajos ad honorem a fin de poder cubrir los gastos (hasta el último centavo) de mi traslado a la provincia".
El arquitecto de 40 años se encontraba de vacaciones en Viña del Mar, Chile, cuando sufrió un infarto y luego de permanecer una semana internado en una clínica privada, consiguió que lo llevaran de regreso a Tucumán.
Télam
