La Argentina, a través del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), se autodeclaró ayer como país libre de influenza aviar altamente patógena (IAAP) ante la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), tras haber cerrado el último brote en aves comerciales, a 179 días del inicio de la emergencia sanitaria.

Fue a través de un documento elevado ante el organismo multilateral, ‘que respalda y sustenta la actual condición de Argentina como país libre de la enfermedad’, señaló el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, ante la culminación de las acciones sanitarias en el último brote en aves de corral.

‘Luego de transcurridos más de 28 días desde la finalización de las tareas de despoblamiento, que incluye la limpieza de las granjas afectadas, se logró el cierre del último de los 18 brotes de IAAP en establecimientos comerciales registrados en el territorio nacional’, explicó el Senasa en un comunicado.