El mercado de combustibles estará desregulado completamente desde el lunes 1 de enero y las principales petroleras analizan un nuevo incremento de naftas y gasoil para los próximos días, en función de variables como la cotización del dólar y el costo internacional del crudo.
Fuentes de las compañías adelantaron a la agencia oficial de noticias Télam que analizan un incremento de precios en los surtidores, tras cerrar 2017 con un aumento promedio en torno al 30 por ciento, por encima de la inflación estimada para el año de menos de 25 por ciento.
Esta decisión se analiza en momentos en que se completará la desregulación del mercado de petróleo y combustibles en la Argentina, por lo cual las empresas tendrán la libertad de fijar los precios según sus costos y sus políticas comerciales e incluso decidir abastecer al mercado mediante la importación.
A partir del lunes entrará en vigencia la decisión del Gobierno nacional de eliminar el registro de importación de petróleo y combustibles, con lo que dio respuesta al reclamo de las empresas petroleras según las cuales la medida es necesaria para la desregulación plena del mercado local.
Esta libertad para importar implica la posibilidad de comprar crudo en el mercado internacional e incluso los distintos tipos de combustibles, de acuerdo con sus conveniencias de costos y comerciales, lo que debería contribuir a un mercado más competitivo.
Para los primeros días de enero, la variable que impulsará a la suba la ecuación de las empresas es el nivel en el que finalmente se acomode el tipo de cambio ya que el dólar en el último mes del año avanzó 7,69%, casi la mitad de la revaluación anual.
Algo similar se registró con el sendero de precios del Brent, que abrió diciembre a 63,57 y a lo largo del mes experimentó una suba de 5,1% hasta los actuales 66,87 dólares.