El blindaje de Argentina frente al avance implacable de contagios con Covid-19 en el país -ayer los casos confirmados pasaron los 500-, forzó al presidente Alberto Fernández a archivar una de sus prioridades antes del inicio de la cuarentena: suspendió la repatriación de los argentinos varados en el exterior.
En una serie de entrevistas que concedió a varios medios nacionales, el presidente anunció que el regreso de los ciudadanos argentinos que están en el exterior y quieren volver al país quedará "suspendido" hasta tanto la pandemia de coronavirus "se haya vuelto manejable".
"Por ahora hemos decidido no hacer ingresar a más gente", afirmó el mandatario en una entrevista con el Telefé.
Sin embargo, Fernández indicó que instruyó al canciller Felipe Solá para que "ayude con recursos a los que están en el exterior" hasta que pueda "ordenarse este tema".
"Salvo algún caso excepcional, van a tener que esperar el momento del regreso. Por ahora, los regresos están suspendidos y las entradas por las fronteras terrestres también", aseguró el Presidente.
Aunque no se diga oficialmente, esta drástica medida tiene una razón lógica en un contexto dramático. Un regreso masivo de personas desde zonas de alto riesgo de coronavirus pondría al límite la capacidad del país para albergar a miles de personas de una sola vez en una cuarentena. Además, muchos de estas personas varadas en otros países podrían venir infectadas de Covid-19 o ser portadores lo que plantea un escenario explosivo cuando aquí se trabaja a contrarreloj para sumar camas y salas de terapia intensiva en todo el país para hacerle frente a los peor que aún está por venir.
Cone este dilema en sus manos, el Presidente advirtió que el gobierno argentino "está tratando de reglamentar los ingresos de mayores de 65 años, que son los más vulnerables en esta pandemia" que afecta al mundo.
"El resto, que espere un poco. Ya los iremos a socorrer cuando el riesgo sea manejable", aseveró Fernández.
El jefe de Estado también sostuvo que el aeropuerto internacional de Ezeiza "no está operativo" y que las autoridades argentinas no están autorizando vuelos en esa estación aérea.
"No es que se cierre, simplemente no vamos a generar vuelos. No está operativo. No se cerró nada, por ahora no está operativo porque no estamos autorizando vuelos", aseguró.
Desde el 15 de marzo pasado, cuando se prohibieron los vuelos regulares para dar cumplimiento al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que establece al aislamiento social obligatorio desde el 20 hasta el 31 de marzo, más de 120 vuelos especiales de diferentes compañías, entre ellos los 38 de Aerolíneas Argentinas y Austral, fueron autorizados por la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) para transportar a argentinos que habían quedado varados en el exterior.
A esos vuelos se sumaron los que realizaron los dos Hércules C-130 de la Fuerza Aérea Argentina, que trasladaron a ciudadanos argentinos varados en Perú, con lo que la cifra de personas que regresaron al país ascendió a cerca de 23 mil.
En tanto, voceros de la Cancillería consignaron ante esta agencia que la cifra de argentinos en situación de espera en distintas partes del mundo asciende a cerca de 10 mil, distribuidos en Europa, Estados Unidos, Cuba, República Dominicana, España, India, Perú, Punta Cana y México, entre otros destinos. Para los argentinos que regresaron, el Ministerio de Transporte dispuso más de 20 micros desde el aeropuerto de Ezeiza para facilitar el regreso de quienes deben ir a sus provincias y ciudades.
Ayuda para Pymes
El Gobierno nacional avanzó ayer en otra medida que se anunciará en las próximas horas para ayudar a pagar salarios a las pymes de sectores afectados por la pandemia de coronavirus y que tengan hasta 25 empleados. Apuntan al rubro gastronómico y el turismo.
