Después de su exitoso paso por Israel donde participó del Foro internacional por los 75 años del fin del Holocausto, el presidente Alberto Fernández ya tiene la agenda armada de lo que será su segundo viaje internacional que llevará a Europa.

La semana que viene, Alberto liderará una gira europea por el Vaticano, Italia, España y Francia, que tendrá como uno de sus ejes centrales sumar apoyos para la renegociación de la deuda, informaron fuentes cercanas al mandatario que participaron de su visita a Israel.

Primero, la Casa Rosada informó que Fernández se reunirá el próximo viernes 31 con el papa Francisco en el Vaticano, el lunes 3 con el primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, en Roma; el martes 4 con el presidente de gobierno español, Pedro Sánchez, en Madrid; y al día siguiente con su par francés, Emmanuel Macron, en París. 

Fuentes cercanas al presidente argentino agregaron que Fernández habló en su paso por Jerusalén, con su par italiano, Sergio Mattarella, para sumarlo a su agenda del lunes 3 y con el rey Felipe de España para hacer lo mismo al día siguiente en Madrid. 

Con excepción de la reunión bilateral con el papa Francisco que ya estaba en los planes presidenciales, el resto de la gira europea fue organizada con un objetivo principal: conseguir el apoyo de Estados con poder de voto en el Fondo Monetario Internacional (FMI) y que han sido críticos de los créditos otorgados al gobierno de Mauricio Macri, según explicaron las fuentes. 

Con ese objetivo en mente, el gobierno busca sumar a la canciller alemana Angela Merkel en la agenda presidencial.

Pese a que la visita al Papa no responde a los esfuerzos del gobierno por renegociar la deuda con los acreedores privados y la discusión de un nuevo acuerdo con el FMI, el mensaje que envió Francisco a los participantes del Foro Económico Mundial de Davos que se realizó en la semana en Suiza pareció estar en sintonía con los argumentos esgrimidos por la Casa Rosada: "No se puede pagar la deuda a costa del hambre de los argentinos", sostiene Fernández. Mientras el Papa advirtió a empresarios y políticos "es necesario situar a la persona humana en el centro mismo de la política".

El mandatario argentino ser reunirá con el Papa en la Biblioteca Privada del Palacio Apostólico del Vaticano para su primer encuentro oficial como presidente. 

La última visita de Fernández al Papa fue en agosto de 2018, cuando aún no era ni candidato. 

Ese encuentro se realizó en la residencia de Casa Santa Marta y participaron dirigentes de otros países de la región como el chileno Carlos Ominami y el brasileño Celso Amorim.

Si bien el apoyo de las potencias europeas será importante para aprobar una nueva negociación con el FMI, en el gobierno queda claro que eso no será suficiente sin el respaldo de Estados Unidos, cuyo voto es de los más importantes dentro del organismo multilateral de crédito.

Sin embargo, según fuentes de su entorno, Fernández no está pensando en un viaje a Washington o un encuentro con un dirigente de primera línea de la Casa Blanca, como el vicepresidente Mike Pence, con quien coincidirá mañana en el Foro Internacional del Holocausto en Jerusalén.

Por el momento, las visitas a Estados Unidos para negociar la deuda las concentra el ministro de Economía, Martín Guzmán, quien viajará hoy a Nueva York.

Guzmán participará mañana lunes de un foro organizado por el Council of Americas, con la misión de transmitir a inversores internacionales la voluntad de pago de la Nación ante el inminente inicio del proceso de reestructuración de deuda nacional y de la provincia de Buenos Aires.