Puerta 8. Diez personas fueron detenidas ayer en allanamientos realizados en el asentamiento Puerta 8, en el partido de Tres de Febrero, en el marco de la investigación por la venta de una partida de cocaína en mal estado.

 

Al menos 17 personas murieron y otras 56 se encuentran internadas, 26 de ellas en estado crítico, en hospitales de los partidos bonaerenses de Hurlingham, San Martín y Tres de Febrero, debido a una intoxicación por el presunto consumo de cocaína adulterada, informaron ayer fuentes del Gobierno provincial.

Los voceros añadieron que la cifra podría incrementarse, ya que hay fallecidos en la vía pública y domicilios, cuya cantidad aún no se pudo establecer, al tiempo que el número de internados se amplía constantemente con el arribo de personas en grave estado a las guardias de los centros asistenciales.

Por el caso hay 10 detenidos y el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, pidió a la ciudadanía descartar la droga comprada en las últimas 24 horas. Ante esto, desde el Ministerio de Salud bonaerense se emitió una alerta epidemiológica por "intoxicación por consumo de cocaína adulterada".

De acuerdo al testimonio de familiares y de los propios internados, la gran mayoría había comprado la droga adulterada en el mismo lugar: se trata de un asentamiento sumamente precario conocido como Puerta 8, ubicado en Campo de Mayo, en la cuenca del río Reconquista y en la localidad de Tres de Febrero.

Desde la fiscalía general de San Martín explicaron: "No sabemos todavía con qué está adulterada. No es algo habitual, este hecho es absolutamente excepcional, no tenemos ningún antecedente, lo cual lleva a pensar que la sustancia que sea, porque aún faltan las pericias toxicológicas, ha sido incluida intencionalmente, no parece ser un error en el procesamiento del material".

Mientras seguían los allanamientos y se esperan los resultados de los análisis y las autopsias, el fiscal general de San Martín dio detalles de la investigación por la ola de muertes tras el consumo de droga envenenada. Aseguró que la adulteración de las sustancias fue intencional.

"Es un hecho gravísimo para la salud pública", dijo Marcelo Lapargo, fiscal general de San Martín, consultado por los fallecimientos.

"Es un hecho excepcional, no tenemos ningún antecedente. Nos hace pensar que la sustancia se incluyó deliberadamente, no es un error del proceso", comentó sobre los detalles del episodio, por el que se realizaban allanamientos en Tres de Febrero.

"Si bien se habló en primera instancia de veneno para ratas, especialistas consultados señalaron que por los cuadros presentados por lo intoxicados debería ser una sustancia derivada de los opioides". Incluso señalaron que algunos de esos pacientes están respondiendo bien al antídoto que les aplicaron.

A esta hora, los investigadores estudian como principal hipótesis una guerra narco, en la que una banda habría adulterado intencionalmente las sustancias que vende otro grupo. "Puede ser que sea un ajuste de cuentas entre narcotraficantes, pero ahora es algo conjetural", dijo el fiscal general de San Martín.

Las dudas

¿El presunto narco exterminador envenenaría la droga de su rival para matar clientes y así hundirlo? ¿No hizo el cálculo de que semejante golpe se volvería contra él, afectaría la confianza del consumidor y desataría una cacería policial? Esas preguntas rondaron en las cabezas de policías y funcionarios judiciales.