El presidente Javier Milei, rodeado del equipo económico ampliado con miembros del Ministerio de Economía y del Banco Central, anunció esta noche que el sector público nacional terminó el primer trimestre con superávit fiscal, es decir con excedente luego de haber realizado sus gastos corrientes y de haber pagados los intereses de deuda. Un resultado fiscal positivo acumulado al término de marzo no se registraba desde 2009, según estimaciones privadas.
Así, sobrecumplió la meta fijada con el Fondo Monetario Internacional mientras el Gobierno aún apunta a conseguir un acuerdo nuevo con el organismo. El equilibrio fiscal fue alcanzado por una combinación de recortes en partidas presupuestarias (obra pública, transferencias a provincias) o licuación de otras en comparación de la inflación (salarios público o jubilaciones).
Datos oficiales anticipados del primer trimestre a los que tuvo acceso Infobae sobre el resultado fiscal del Tesoro –el dato que publica la Secretaría de Hacienda y que anunciará el jefe de Estado involucran también a otras áreas de la administración pública nacional– muestran que las partidas del gasto que tuvieron los ajustes más marcados fueron los gastos de capital (obra pública) que en términos nominales cayeron 68 por ciento.
Otros, por su parte, subieron pero muy por debajo de la inflación, como las Transferencias al sector privado –típicamente subsidios– que subieron 98%, universidades (180%), transferencias a provincias (solo 2,7%) y salarios públicos (195 por ciento).
Datos oficiales anticipados del primer trimestre sobre el resultado fiscal del Tesoro muestran que las partidas con ajustes más marcados fueron obra pública, subsidios, transferencias a provincias y universidades y salarios públicos
Solo el Tesoro, que es uno de los componentes del sector público nacional -que es lo mide el Ministerio de Economía para calcular su resultado fiscal- terminó el primer trimestre con 1,9 billones de pesos de superávit primario, aunque un déficit financiero de 967.000 millones de pesos al agregar en la cuenta el pago de intereses de deuda, que en el primer trimestre fueron de 2,9 billones de pesos.
Según aseguraron fuentes oficiales a Infobae, el resultado superavitario que anunciará Milei tendrá cifras distintas ya que esa contabilidad final incluye, además del Tesoro, organismos descentralizados, institutos de Seguridad Social (Anses), PAMI y fondos fiduciarios, entre otras áreas de la administración pública. Hasta febrero, por caso, el Palacio de Hacienda había registrado un superávit primario de 3,2 billones de pesos y financiero por $856.000 millones.
El objetivo acordado con el FMI para el primer trimestre del año implicaba que el Gobierno pueda mostrar un excedente primario de $962.000 millones. Un resultado fiscal superavitario no tiene antecedentes al final del primer trimestre desde 2009, según estimaciones del director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) Nadin Argañaraz.
Estimaciones privadas ya preveían que en marzo había tenido lugar el ajuste del gasto más pronunciado en lo que va del año. Dos informes privados recogieron, con los datos del gasto devengado de marzo -es decir lo que fue comprometido a pagar pero no efectivamente abonado- cuál fue la tendencia de recorte en las erogaciones presupuestarias en el tercer mes del año, y en ambos casos la tendencia que observaron fue el de una poda superior al 40% en términos reales, por encima del ritmo que había tenido en enero y febrero.
Según Analytica, “en marzo, el gasto primario real devengado tuvo una caída mensual del 9,7 por ciento sin estacionalidad, y del 41,3% interanual. Considerando el primer trimestre, la contracción en términos reales fue del 36,5% comparando con igual período del año pasado”, mencionaron en un informe a clientes. Ese 41,3% de caída en marzo se compara con el 30% que había registrado enero y 35% en febrero.
El resultado superavitario que anunciará Milei tendrá cifras distintas ya que esa contabilidad final incluye, además del Tesoro, organismos descentralizados, institutos de Seguridad Social (Anses), PAMI y fondos fiduciarios
“Entre las partidas devengadas con mayores ajustes reales respecto a marzo 2023 figuran la obra pública (-89,9%), los subsidios económicos (-67,6%), y las transferencias corrientes a provincias (-69,7 por ciento). A su vez, estas mismas partidas fueron las más afectadas durante el primer trimestre, con caídas reales interanuales del 86,1%, 59,6% y 62,6%, respectivamente”, plantearon desde esa consultora.
Por su parte, la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP) registró que “los Gastos Totales devengados de la Administración Nacional se contrajeron un 42,9% ajustado por inflación en términos interanuales”, explicaron en un informe este lunes.
“Todas las partidas del gasto experimentaron disminuciones significativas, destacándose las retracciones en el gasto de capital (-84,3%), y también en las prestaciones de la seguridad social (-38,7%) y en las transferencias corrientes (-38,4%), que entre ambos conceptos concentran el 80% del gasto”, especificó ASAP.
“En el acumulado del primer trimestre del año, los gastos totales de la Administración Nacional presentaron una caída de 30,6%, que se acentúa en casi 6 puntos porcentuales si se detraen los pagos en concepto de intereses (el gasto primario cayó un 36,4 por ciento)”, continuó. La medición de ASAP reflejó que en marzo el resultado de las cuentas públicas fue deficitario en términos primarios y financieros.
No se puede proyectar de manera lineal con el dato oficial de la Secretaría de Hacienda ya que se trata de métodos de medición distintos. Sin ir más lejos, ASAP también había medido déficit financiero devengado en febrero y el dato de base caja terminó por mostrar superávit.
FUENTE: INFOBAE