El gobernador de San Luis, Claudio Poggi, promulgó una reforma de ley que establece en 12 meses el plazo máximo para que familias solidarias puedan custodiar a niños en situación de vulnerabilidad social, permitiéndoles a su vez la posibilidad de adoptar a esos menores. Según autoridades, la ley impulsa a la Justicia a decidir sobre el destino del niño en adopción con mayor celeridad.

Este sistema prevé que niños y ancianos ‘en situación de vulnerabilidad social‘ puedan vivir con una familia, previamente anotada en un registro, que lo reciba en su seno a cambio de una ayuda mensual que da el Estado. También estipula la constitución de familias especializadas para menores con conductas antisociales y familias de emergencias.

“Familias Solidarias es un organismo que cumple 10 años y que nació con la desinstitucionalización de hogares‘, aseguró el gobernador al promulgar los cambios de la ley a principios de mes. Protege a niños que pernoctan en espacios públicos y no mantienen contacto con sus familias biológicas, que están expuestos a la droga, la prostitución o el abuso, dándoles la posibilidad de ser rescatados por una familia solidaria, haciéndose cargo el gobierno provincial de los gastos que demanda el niño a través de un aporte mensual.

Al detallar los recientes cambios, el gobernador Poggi destacó que las familias solidarias ahora podrán ser consideradas en la adopción de menores que estén en su guarda. La normativa hasta ahora vigente no fijaba tiempos: los niños que vivían con familias solidarias podían alcanzar la mayoría de edad bajo ese techo sustituto y transitorio. Ahora, a partir de la modificación, los niños solo podrán estar con una misma familia por seis meses, prorrogables a un máximo de doce.

Según el gobernador Poggi, “el juez tiene la obligación de pedir un informe sobre los lazos del niño con esa familia, antes de asignarlo en adopción, con el agregado de que puede valorar que los adoptantes sean los padres solidarios”, pero “deberán agotarse previamente todas las alternativas de adopción a favor de la familia biológica del chico”.

Si las familias solidarias quieren adoptar deberán cumplir con todos los requisitos que determina el Registro Único de Adoptantes. Pueden incorporarse al Registro de Familias Solidarias todas aquellas familias constituidas legalmente o de hecho. Profesionales en psicología y trabajo social visitan la casa de las familias solidarias, el barrio en el que viven, e indagan sobre sus motivaciones y capacidades.

Fuente: Télam