Este sábado 22 de febrero se cumplen ocho años desde aquella trágica mañana de 2012 en la que una formación del tren Sarmiento no detuvo su marcha al arribar a la plataforma de la estación Once y chocó con los paragolpes de contención. Producto de este accidente, fallecieron 52 personas y 789 resultaron heridas.

Esta mañana, a las 8.30 -hora exacta en la que se produjo la colisión- familiares y amigos de las víctimas llevaron a cabo un acto homenaje en el andén 1 de la cabecera del Sarmiento en homenaje a su memoria.

Por su magnitud y brutalidad, se convirtió en la tercera tragedia ferroviaria más grave en la historia de la Argentina.

Tal es así que se llevó a cabo un histórico juicio que concluyó con la condena de 21 personas. De esos condenados, sólo se encuentran encarcelados nueve, otros siete tienen prisión domiciliaria y los cinco restantes están en libertad.

Dicho juicio se produjo en dos etapas conocidas como “Once I” y “Once II“. El primer juicio oral comenzó en marzo de 2014, en el que fueron juzgadas 28 personas, entre ellas exfuncionarios y directivos de TBA -empresa que tenía la concesión de la línea Sarmiento-.

En diciembre de 2015, el Tribunal Oral Federal 2 condenó a 21 acusados por los delitos de administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública y estrago culposo. Otros 7 fueron absueltos.

 

Los jueces de la causa resolvieron que el tren funcionaba en malas condiciones que habían sido advertidas, que los fondos públicos que TBA recibía eran invertidos en otras cuestiones, y que el maquinista tuvo una conducción negligente.

Meses más tarde, la Cámara Federal de Casación confirmó 20 condenas, rebajó la mayoría de las penas que había puesto el Tribunal Oral y absolvió a un acusado. Las penas más altas las recibieron Sergio Cirigiliano -empresario de TBA- y el exsecretario de Transporte Ricardo Jaime a 7 años de prisión.

Jaime tuvo una pena única de 8 años por otras dos condenas y ya estaba preso por otras causas. Los exdirectivos de TBA –Marcelo Calderón y Jorge Álvarez– fueron condenados a 6 años de prisión, Juan Pablo Schiavi a 5 años y medio y el resto a penas que fueron de los 5 a los 3 años de prisión de cumplimiento efectivo. El maquinista Marcos Córdoba fue condenado a 3 años y 3 meses.

En la actualidad, sólo nueve de ellos se encuentran en prisión: Cirigliano, Jaime, Schiavi, Córdoba, Álvarez y otros cuatro directivos de TBA. Todos se encuentran bajo el “Sistema de intervención para la reducción de índices de corruptibilidad”, destinado a detenidos con alto poder económico, que formen parte de bandas de crimen organizado o que están condenados por corrupción.

Otros siete condenados están bajo arresto domiciliario que les fue otorgado el año pasado por diversos motivos: Laura Ballesteros, Calderón, Roque Cirigliano, Guillermo D´Abenigno, Carlo Michelle Ferrari, Francisco Pafumi y Antonio Suárez, todos de la empresa que manejaba el tren Sarmiento.

El condenado 21 de la tragedia de once es Julio De Vido. El exministro de Planificación Federal –de quien dependía el área de transporte en ese momento– recibió el 10 de octubre de 2018 una pena de 5 años y 8 meses de prisión que le impuso el Tribunal Oral Federal 4 durante el segundo juicio oral del caso.

De Vido fue condenado por el delito de administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública, debido a que los jueces entendieron que como funcionario era responsable de los fondos que el Estado le brindó a TBA. De Vido nunca estuvo en prisión por la tragedia de Once.