Un grupo de jóvenes encabezados por un docente se dedica a pintar murales en paredones de escuelas, hospitales, comercios y hasta viviendas, con el objetivo de generar espacios de contención y participación social a través de la pintura. Se trata del grupo denominado "Los Muraleros", una ONG que desde 1986, y por iniciativa de alumnos de una escuela bahiense, decidieron pintar un mural para el 25 aniversario de la institución.
Más de tres mil jóvenes participaron de estas actividades desde sus comienzos, y pintaron murales en casi todos los establecimientos educativos de Bahía Blanca, sociedades de fomento, centros de jubilados, hospitales, iglesias y clubes, como así también en el interior del país y hasta en Chile.
Al respecto, el profesor Miguel Angel Kreitz, a cargo del grupo, narró que "todo surgió en 1986 por la iniciativa de alumnos de una de las divisiones de tercer año de la Escuela de Ciclo Básico". "Yo daba Artes Plásticas en el colegio y junto con un grupo de alumnos decidimos pintar un mural alusivo al aniversario", comentó el docente.
Kreitz, quien es profesor de escultura y dibujo en la Escuela de Artes y en las Escuelas Medias de la Universidad Nacional del Sur, buscó que el grupo continuara vinculado con la pintura de los murales en otras escuelas.
"La iniciativa contó con el apoyo del Concejo Escolar y comenzamos a combinar el interés por la expresión artística con la labor vocacional a favor de los sectores más vulnerables", comentó el profesor. Fue entonces que en 1992 la División Juventud de la Municipalidad de Bahía Blanca convocó al grupo para organizar un Taller de Pintura Mural y la coordinación quedó a su cargo.
Entre los objetivos del grupo figura la actividad de pintura de murales, que anteriormente se realizaba de manera espaciada y sin regularidad, pero empezó a llevarse a cabo todos los sábados. También varió la composición social del grupo, ya que junto con los estudiantes de las escuelas del centro bahiense se empezaron a incorporar adolescentes de los barrios más pobres de la ciudad, y jóvenes, en general, que deseaban aprender a pintar.
En la actualidad el docente trabaja con 12 chicos de 15 a 22 años todos los sábados realizando la pintura de los murales, en una actividad gratuita.

