Hasta no hace mucho tiempo, tener un vino propio era casi una excentricidad exclusiva de Francis Ford Coppola, Diane Keaton, Gérard Depardieu o Brad Pitt, entre otros, incluso un puñado de argentinos que se sumaron a esta movida. Ahora en San Juan también es posible, y en un valle de privilegio reconocido por sus vides de alta calidad enológica. Se trata del proyecto inmobiliario-productivo iniciado en el año 2013, ya en plena producción y hasta con un vino (Irracional), elaborado por el prestigioso enólogo Daniel Pi, uno de los emprendedores junto a otros empresarios como Miguel Di Gennaro, Juan Pablo Candisano, Cecilia Zunino y Osvaldo Rebollo.
Fue en ese momento cuando compraron una finca en el Valle de Calingasta convencidos de las extraordinarias características de la zona para la producción de uvas, tanto que en el año 2015, el reconocido viticultor Roberto De La Mota, se encargó de diseñar lo que ahora es la Finca Cahuak. Allí se implantaron 50 hectáreas de varietales que con el paso de los años comenzaron a expresar el potencial esperado: uvas para elaborar grandes vinos que obtuvieron reconocimiento internacional.
Así en el 2019, nació "Irracional", un Malbec vinificado con uvas de Cuuna, que ya obtuvo las mejores criticas y puntajes por parte de los principales críticos internacionales vino, que en definitiva terminaron de refrendar su juicio de excelencia respecto de las características enológicas del proyecto. Robert Parker le otorgó 93 puntos, mientras que Tim Atkin le dio 94 y James Suckling 95.
"Hoy Cuuna está al nivel de los mejores valles argentinos logrando vinos con expresión propia que destacan las características de un terroir que lo tiene todo", indica Juan Pablo Candisano.
Las micro-vinificaciones llevadas a cabo los últimos años con uvas de antiguos viñedos de la zona, ya demostraban su potencial y a eso se sumaron varios estudios de suelo y de clima que corroboraron las inmejorables condiciones del valle para este tipo de cultivo.
El nombre elegido para la propuesta (Cuuna), obedece a al espacio que hay entre el pedemonte y la Cordillera de los Andes que, precisamente se asemeja a una cuna, en este caso donde nace los viñedos de alta calidad enológica.
Otra forma de hacer negocios
Se sabe que llegar a producir un vino es algo complejo, sobre todo para lograr grandes resultados. Más si se quiere uno de alta gama con controles de la vid desde su nacimiento hasta llegar a una presentación de excelencia. Ese, seguramente es el primer obstáculo de los soñadores que aspiran a tener uno propio y ofrecerlo al mundo. Es aquí donde Cuuna da toda la solución, ya que brinda la posibilidad de ser parte de un emprendimiento productivo a gran escala sin necesidad de involucrarse ni en la administración ni en la gestión, con una interesante tasa de retorno. Como si eso fuera poco, se suma que la finca en cuestión se encuentra ubicada en un bello lugar con la Cordillera de los Andes delante de los ojos, y un cielo único que cobija el emprendimiento que promete experiencias únicas.
La renta para el inversor proviene de la venta de la uva a las más importantes bodegas argentinas para vinos de alta gama por su valor enológico, o bien por la venta de su propio vino que se hará en el atelier destinado a ese fin. Por supuesto que para dicha elaboración cada inversor contará con el asesoramiento de los expertos.
Arquitectos al frente
Integra estudio de Arquitectura, a cargo de Carlos González Olsina, será el encargado del desarrollo del Masterplan en la Finca Cahuak. La clave para el diseño está relacionado con su vista directa al Aconcagua, inspirador de los espacios y sensaciones. El primer objetivo es la construcción de la recepción y club de vinos para que quienes visiten el valle puedan experimentar con todos los sentidos. De acuerdo al avance del proyecto, la idea es comenzar a disfrutar de esta primera etapa y en 2023 iniciar la construcción de la bodega, hotel y restaurante.
El proyecto paso a paso
Primer paso: Ser propietario de una parcela en Cuuna
Sin duda es el ingreso al fascinante mundo del vino. Se puede comprar desde media hectárea en adelante.
Segundo paso: El viñedo propio
El equipo de enólogos e ingenieros diseñaron la finca para recibir varietales y clones acorde al micro terroir de cada parcela.
Tercer paso: La vendimia
Al año de implantadas las vides ya dan los primeros frutos y llegan a la madurez en su tercer verde. Entre fines de febrero y principios de marzo tiene lugar la vendimia, los expertos de Cuuna inspeccionan diariamente cada cuadro y varietal para seleccionar las uvas por su punto de madurez exacta y así lograr la máxima calidad.
Cuarto paso : El vino propio
Si la preferencia de las personas que eligen ser inversores de Cuuna es crear y elaborar su propio vino, contarán con un atelier donde elaborarlo y el respaldo de los expertos. Podrán ser su propio enólogo y hacer las pruebas que los lleven a lograr el vino que buscan.
En Cuuna disponen de las soluciones y asistencia para crear su marca, diseño de etiqueta, tipo de botella, corcho y demás elementos que hacen al packaging final de su propio vino.