Analía Verónica Villafañes y Mario Ontiveros con sus vidas escriben una historia que se ha convertido en testimonio de que, con amor, todo se puede. Si, ese amor que se manifiesta en hechos concretos, en acciones transformadoras del propio entorno y del de los demás luego.

Mientras la pequeña fábrica ubicada en Campo Afuera, departamento Albardón, no deja de hacer saber con sus sonidos que está viva a pesar de todo y late su corazón, señalan: "Nosotros somos ‘Jugos Frutis’, jugos naturales, donde trabajamos nosotros como matrimonio junto a mi hijo Valentín y su amigo Mateo", señalan Verónica y Mario.

El comienzo se remonta "ya a cuatro años aproximadamente. En una forma más sencilla, hace más de 10 años aproximadamente", recordando su origen "en el Lote Hogar N" 6, sobre Calle Tucumán, donde vivíamos en un principio cuando conformamos nuestro hogar".

Ambos se conocieron de estudiantes hace unos 20 años atrás, ella de administración de empresas y él, trabajo social, "aspectos que nos fueron muy útiles para nuestro emprendimiento". Mario al conformar su familia hace unos 18 años encontró trabajo en la Policía, donde se desenvolvió y aprovechó de estudiar higiene y seguridad, que les permite una visión de la importancia de la inocuidad alimentaria con que trabajan hoy. Luego dejó "la fuerza de policía provincial para concentrarse en este proyecto productivo al 100%".

La demanda de jugos naturales crece en la Argentina de la mano de la demanda de alimentos con bondades nutraceúticas.  

"En aquel momento lo hacíamos aún más artesanal que ahora. No teníamos las máquinas de ahora. Pero siempre tuvimos la idea de crecer e industrializarnos", indicaron.

"Cruzábamos a la plaza conocida como el Parque Latinoamericano con una barrita que tenía rueditas donde expendíamos el jugo", recordaron agregando "la gente se arrimaba y hacía cola para comprar su vasito y eso nos animó mucho. De esto hace más de 5 años".

Hoy, "contamos con todas las habilitaciones correspondientes y tenemos todo en regla para la comercialización".

"Siempre produjimos con la misma receta. Una receta familiar que pronto nos permitió vender no sólo en el Parque, donde ahora abrimos una heladería también, sino proveer a eventos y fiestas con nuestra elaboración diaria", marcando cómo el esfuerzo desde cero, sin capital pero sí con amor y pasión por lo que hacen, hoy les permite contar con una pequeña fábrica artesanal de unos 200 metros cuadrados en plena ruta nacional N¦ 40.

"La materia prima la compramos en el Mercado de Rawson a los introductores de naranja con una cuidadosa mirada a la calidad y sanidad de la fruta fresca", indicaron agregando que "nuestro volumen semanal ronda actualmente los 1.200 litros de unos 1.800 kilos de citrus y esperamos ahora, a partir de nuevos acuerdos con heladerías y cafés, aumentar nuestra comercialización", indicaron.

Finalmente consignaron que "nunca fue fácil, nuestros padres y amigos nos acompañaron en cada desafío. Pero sí estamos seguros de que aun de los momentos más oscuros, de las situaciones más adversas, cuando uno conoce sus propias y fuerzas y le da dirección, desarrolla la creatividad y el ingenio que la pasión por lo que uno hace y el amor entre los que desarrollamos el proyecto; en el tiempo se ven los buenos resultados. No hay que bajar los brazos nunca".

Verónica y Mario comenzaron a escribir su historia juntos hace 20 años atrás, en una de las peores crisis de nuestro país. Hoy simplemente nos queda cerrar esta nota destacando que el ejercicio diario de la suma de sus valores humanos como el autoconocimiento, ingenio y el amor por su proyecto y las demás personas es lo que terminamos percibiendo los demás como heroísmo.

MÁS DATOS

FRUTIS – Jugos Naturales, Albardón, Argentina

0264 545-4287 —  jugosfrutis@gmail.com